Como ya conté en entradas anteriores, mis padres son profesores de Literatura. No sé si será la época en que estudiaron (década de los 70), o la universidad, o su gusto personal, pero ambos mueren por la Literatura española, la cultura española, los españoles en general ...
Así que en casa el tocadiscos (¡Dios mío, que antigüedad!) sonaba todo el día con Serrat, Isabel Pantoja, Manolo Galván (¡perdónalos, señor, eran jóvenes!...) y otras músicas castizas. (Hoy por hoy han sumado a Sabina, La Oreja de Van Gogh, Ismael Serrano y otros).
Pero había un disco que pasaban una y otra vez: El "Romancero Gitano" de García Lorca, recitado no sé por quién pero seguro que era bien castellano y que lo hacía de manera magnífica.
De allí que muchas veces, sin darme cuenta, así como a algunos "se les pega" una canción, yo me encuentro recitando "...la luna vino a la fragua con su polizón de nardos..." o "...o si yo pudiera, mocito, este trato se cerraba, pero yo ya no soy yo, ni mi casa ya es mi casa..." o "...fue la noche de Santiago y casi por compromiso, se apagaron los faroles y se encendieron los grillos..."
Mas tarde, mi mamá puso en mis manos "Doña Rosita la Soltera o el lenguaje de las flores", una bella obra de teatro, que abrió las puertas a las demás.
Mi favorita ha sido siempre la oscura "La Casa de Bernarda Alba" que vi representada en diversas versiones, y siempre impactantes, con ese final inolvidable que te deja temblando hasta después de la salida del teatro: "Las lágrimas cuando estés sola. ¡Nos hundiremos todas en un mar de luto! Ella, la hija menor de Bernarda Alba, ha muerto virgen. ¿Me habéis oído? ¡Silencio, silencio he dicho! ¡Silencio!."
"Bodas de Sangre" ha quedado fijada en mi memoria por la película impactante de Carlos Saura (1981). La potencia de esos bailes, la pasión emanada de esos cuerpos y de esas miradas son lo primero que me viene a la mente cuando recuerdo esta obra de teatro.
Finalmente, "Yerma", esta triste historia que leí no hace mucho (también vi una adaptación teatral), llegó a mi vida en un momento en que esperaba un embarazo que no llegaba nunca, de modo que tuvo una resonancia especial para mí.
García Lorca es mas que un autor para mí: es una presencia, es un sentimiento, una forma de vivir y pensar el mundo, el amor, la pasión, el dolor y la muerte. Siempre está. Sus obras se me presentan en pequeños fragmentos como ecos. Y por eso no necesito fechas ni homenajes para decidir recordarlo humildemente en este espacio.
Estoy contigo Valeria. Lorca es de esos poetas que te entran por los poros de la piel. Cuando mi hija era pequeña tenía que aprender una poesía para el colegio. Yo de broma le empecé a leer la muerte de Antoñito el camborio y a lo aonto, a lo tonto se la fue aprendiendo. Aun hoy, pasados muchos años, le digo que me la repita y allá arranca ella: Voces de muerte sonaron cerca del Guadalquivir....
ResponderEliminar¡¡Qué maravilla!! Esa educación que ha favorecido tu atracción por García Lorca es un gran patrimonio que te han transmitido tus padres.
ResponderEliminarPara mi García Lorca es, como para ti, un faro que me guía y que me emociona.
Un abrazo!!
No sé si alguna vez te conté que mi mamá es escritora. Escribe poesía y me crié con las poesías de Hernández en la voz de Serrat y los libros de poesía de Neruda, García Lorca, Storni, etc, desparramados por la casa.
ResponderEliminarAhora intento que escuche a Ismael Serrano, pero se niega, jaja, igualmente iré a verlo el próximo mes aunque tenga que ir sola.
Besos.
Oesido: Yo siempre digo que siempre estoy buscando que me cuenten una historia. Y las poesías de Lorca son historias maravillosas... si a eso le agregamos su musicalidad y su belleza... memorizarlas es inevitable...
ResponderEliminarLaura: si, la verdad es que siempre estaré agradecida a mis padres por haberme regalado el amor por los libros, aunque nunca me forzaron a nada... fue una cuestión ambiental, jaja...Otro dato de fanastismo por lo español: mi hermana se llama Jimena, como la esposa del Cid Campeador!!! (¡¡¡Por suerte yo me salvé de llamarme Dulcinea!!!)
Luciana: Si, sabía que tu mamá es poeta. qué lindo!! en casa también había miles de libros, y de los autores que mencionás. Alfonsina era mi favorita de la adolescencia: Nadie como ella para reflejar amores imposibles.
La literatura española no es lo mío pero García Lorca siempre he ocupado un lugar en mi corazón. Quizá soy más de su teatro y La casa de Bernarda Alba me impresionó mucho cuando la vi representada por unas compañeras del instituto y más todavía en la película.
ResponderEliminarLuciana, ¡qué envidia! Ismael Serrano en tierras argentinas ;)
Besitos
Hola Valeria: de García Lorca sólo leí Un poeta en New York. Lo demás es desconocido. Creo que me estoy perdiendo de un poeta bueno.
ResponderEliminarsaludos
Pues si que es cierto. Yo que no soy de recitar poesías, de vez en cuando me descubro diciendo algunos versos suyos.
ResponderEliminarEn cuanto a su teatro -recuerdo una versión en Ballet de Bodas de Sangre; a pesar del tiempo transcurrido. Y Yerma ... ¡es terrible!
Precisamente hoy en el Babelia (suplemento del periódico El País) leía un articulo de Antonio Muñoz Molina sobre un libro -investigación sobre su muerte.
Te dejo de regalo este poema que un día "descubrió" tu padre y nos pareció hermoso .
ResponderEliminarDE OTRO MODO
La hoguera pone al campo de la tarde
unas astas de ciervo enfurecido.
Todo el valle se tiende.Por sus lomos,
caracolea el vientecillo.
El aire cristaliza bajo el humo.
-Ojo de gato triste y amarillo-.
Yo en mis ojos paseo por las ramas,
Las ramas se pasean por el río.
Llegan a mí mis cosas esenciales.
Son estribillos de estribillos.
Entre los juncos y la baja-tarde
qué raro que me llame Federico!
(DESPUÉS DE LEER ESTO ,UNO SE MUERE DE AMOR POR GARCIA LORCA ¿O NO? también volví a enamorarme de tu padre cuando me lo leyó)
ahh que bonito tener padres que abran para tí el camino a reconocer la buena literatura. Lorca es de mis poetas consentidos.
ResponderEliminarun beso,
Ale.
A mí me encanta "La casa de Bernarda Alba"; leí el "Romancero Gitano" hace unos días y me pareció precioso: me gustó especialmente el poema de "La casada infiel" y también el que representa el martirio de Santa Olalla.
ResponderEliminarSaludos.